Un abogado sanjuanino fue denunciado por abuso sexual contra la esposa de un colega

Escándalo judicial en San Juan

El imputado se autodefendió en la audiencia, negó los hechos y calificó la denuncia como “un circo”. La Justicia formalizó la causa por abuso sexual simple y abrió una investigación de seis meses.

Una vez más, un abogado sanjuanino quedó en la mira de la Justicia. En esta oportunidad, el profesional fue denunciado por abuso sexual simple y la presunta víctima es la esposa de un colega. El acusado fue identificado como Daniel Humberto Jaime Ovalles, quien decidió autodefenderse durante la audiencia de formalización realizada en el ámbito judicial.

Jaime Ovalles, quien supo integrar el Foro de Abogados de San Juan, escuchó la imputación en su contra, se declaró inocente y se dirigió a la denunciante con expresiones descalificantes, al afirmar que la denuncia sería falsa y que la mujer estaría “haciendo un circo”.

Según la acusación expuesta por la ayudante fiscal Pérez Lloveras, de UFI CAVIG, el hecho denunciado habría ocurrido en junio de este año en la puerta del domicilio de la presunta víctima, ubicado en Capital. La mujer relató que ese día se encontraba en la vereda de su casa cuando Jaime Ovalles se presentó manifestando que necesitaba hablar con su esposo, quien no se encontraba en el lugar.

La denunciante aseguró que le indicó que su pareja no estaba y que ingresaría a su casa únicamente para buscar lapicera y papel para anotar el número telefónico del abogado, quien —según su testimonio— insistía en obtener su contacto personal. Fue en ese contexto cuando, siempre de acuerdo a la denuncia, el imputado la siguió hasta el interior del domicilio, pese a que no había sido invitado a ingresar.

Allí, la mujer sostuvo que Jaime Ovalles se le acercó por detrás, la apoyó contra su cuerpo y le tocó los senos. Ante esta situación, declaró que quedó paralizada y no logró reaccionar, mientras que el acusado se retiró del lugar de manera inmediata.

¿Qué significa que “se dio a la fuga” en este caso?

En el marco de la imputación, la expresión “se dio a la fuga” no implica una huida policial ni un escape formal, sino que hace referencia a que, tras el presunto abuso, el acusado se retiró rápidamente del domicilio, sin dar explicaciones ni permanecer en el lugar. Es una descripción del comportamiento posterior al hecho, no una figura penal autónoma.

Durante meses, la mujer no realizó la denuncia. Recién el 3 de noviembre, la situación salió a la luz. Ese día, Jaime Ovalles y otros profesionales concurrieron nuevamente al domicilio por una causa civil. El esposo de la denunciante salió a atenderlos y permitió el ingreso solo de una arquitecta. Sin embargo, según el relato, Jaime Ovalles habría respondido de manera prepotente: “Voy a ir igual”, insistiendo en ingresar.

Tras ese episodio, el marido notó a su esposa visiblemente afectada. Al preguntarle qué ocurría, la mujer le relató el presunto abuso ocurrido en junio. Ese mismo día se radicó la denuncia en UFI CAVIG.

¿Por qué volvió al domicilio pese al presunto hecho?

Este punto es uno de los aspectos que más interrogantes genera en la causa. Según consta en la investigación, Jaime Ovalles mantenía un vínculo profesional frecuente con el esposo de la denunciante, lo que habría motivado su presencia reiterada en el domicilio por cuestiones laborales. No obstante, será materia de análisis judicial determinar si esa insistencia tuvo alguna otra motivación y si existió un comportamiento intimidatorio o abusivo posterior al hecho denunciado.

En el marco de la investigación, una psicóloga evaluó a la mujer y señaló que presentaba angustia, vergüenza e incertidumbre, indicadores compatibles con situaciones de abuso. Ese mismo día, una jueza dictó medidas tutelares para proteger a la presunta víctima.

⚖️ La defensa del acusado

Durante la audiencia, Jaime Ovalles negó de manera categórica los hechos y sostuvo que se trata de una falsa denuncia. Afirmó que la mujer tendría antecedentes de presentaciones judiciales conflictivas en el ámbito del fuero de Familia y aseguró que el objetivo sería perjudicar su carrera profesional.

Además, señaló que actualmente interviene en una causa judicial contra el esposo de la denunciante, relacionada con un proceso de desalojo del inmueble que habitan, lo que —según su postura— explicaría el conflicto y la denuncia en su contra.

Finalmente, solicitó a la jueza de Garantías Celia Maldonado de Álvarez que la causa sea desestimada o archivada.

La magistrada resolvió formalizar la investigación penal preparatoria, imputó al abogado por abuso sexual simple, fijó un plazo de seis meses de investigación y dispuso que el acusado continúe el proceso en libertad.