Disminuyen los focos activos en el incendio en Epuyén: “guardia de cenizas” para evitar reavivaciones

Las bajas temperaturas nocturnas y la rotación del viento con ráfagas menores a 40 km/h permiten el avance en el control del incendio. Más de 200 brigadistas trabajan en tareas de prevención ante la falta de lluvias pronosticadas.

Los focos activos del incendio forestal en Epuyén, Chubut, comenzaron a disminuir gracias a condiciones climáticas favorables, como las bajas temperaturas durante la noche y la rotación de los vientos con ráfagas menores a los 40 km/h. Sin embargo, el riesgo persiste, y 210 brigadistas continúan desplegados en la zona para realizar tareas de contención y vigilancia.

La estrategia actual incluye una “guardia de cenizas”, un operativo clave para evitar que el fuego se reavive en áreas controladas. Estas tareas se centran en enfriar puntos calientes y asegurar perímetros críticos. A pesar de los avances, la falta de precipitaciones previstas para los próximos días mantiene en alerta a los equipos de emergencia.

El incendio, que afectó grandes extensiones de bosque nativo, ha generado preocupación entre los habitantes y autoridades locales, quienes trabajan en conjunto para mitigar el impacto ambiental y social del desastre. El Servicio Nacional de Manejo del Fuego (SNMF) informó que las condiciones climáticas seguirán siendo monitoreadas para ajustar las estrategias de combate y prevención.

Aunque la situación ha mejorado, las autoridades advierten que el peligro no ha pasado por completo y llaman a extremar las precauciones en la región.