Consumo de carne de vaca en mínimo histórico: alternativas en auge

La Cámara de la Industria y Comercio de Carnes y Derivados informa que el consumo de carne de vaca en Argentina ha alcanzado su nivel más bajo en 30 años, impulsando la búsqueda de alternativas alimenticias.
Según datos recientes de la Cámara de la Industria y Comercio de Carnes y Derivados de la República Argentina (CICCRA), el consumo de carne de vaca en el país ha registrado su nivel más bajo en tres décadas. Esta tendencia se atribuye principalmente al aumento significativo de los precios, que han escalado un 283,9 % en comparación con el mismo período del año anterior, según los datos de mayo de 2024.

El incremento exorbitante en los precios de la carne de vaca ha llevado a los consumidores argentinos a buscar alternativas alimenticias más económicas y accesibles. Algunas de las opciones que están ganando popularidad como sustitutos de la carne de vaca incluyen:

  1. Pollo: Considerado tradicionalmente como una fuente más asequible de proteínas, el pollo ha visto un aumento en su demanda a medida que los precios de la carne de vaca se han disparado.
  2. Cerdo: Otra alternativa que está ganando terreno debido a su costo relativamente más bajo en comparación con la carne de vaca. Productos como el cerdo fresco y procesado están siendo cada vez más elegidos por los consumidores.
  3. Pescado y mariscos: Aunque tradicionalmente consumidos en menor medida en comparación con la carne de vaca, los productos del mar también están siendo considerados como opciones viables para diversificar la dieta y mantener un balance nutricional adecuado.
  4. Alternativas vegetales: La creciente popularidad de las dietas basadas en plantas ha llevado a un aumento en la demanda de alternativas de carne vegetal, como hamburguesas a base de vegetales, tofu y seitan.

La situación actual refleja no solo un cambio en las preferencias alimenticias de los argentinos, sino también un ajuste necesario frente a los desafíos económicos que afectan el acceso a productos básicos como la carne de vaca. Las autoridades y expertos en la industria continúan observando de cerca esta tendencia y sus implicaciones en la dieta nacional y el sector agropecuario.

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