Sadomasoquismo y misterio: la muerte de la amante de Moura y el dato clave que definiría la causa
La Justicia investiga si hubo consentimiento en la práctica sexual que provocó la muerte de Andrea Rojas Murillo. El fiscal avanza en la recopilación de pruebas para determinar si el guitarrista de Virus será imputado.
La trágica muerte de Andrea Rojas Murillo, una joven chilena de 28 años, ha generado un gran revuelo tras conocerse que ocurrió en el marco de una práctica de sadomasoquismo. Según fuentes judiciales, el fiscal a cargo de la causa trabaja en esclarecer si hubo consentimiento pleno en las acciones que llevaron al desenlace fatal.
El caso apunta directamente al guitarrista de la legendaria banda Virus, quien estaba acompañado de la víctima la noche de los hechos. La defensa del músico asegura que las prácticas fueron consensuadas y que no hubo intención de causar daño. Sin embargo, las circunstancias aún son confusas, y un detalle en particular podría cambiar el rumbo de la investigación.
La autopsia preliminar confirmó que la muerte fue consecuencia de asfixia durante una práctica sexual, un hecho que complica aún más la situación. Entre las pruebas que se analizan se encuentran mensajes de texto, grabaciones y posibles testimonios de allegados.
El fiscal busca determinar si se trató de un trágico accidente en un contexto consensuado o si hubo negligencia o coacción, lo que podría derivar en la imputación del músico. La causa ha despertado un intenso debate público sobre los límites del consentimiento y las prácticas de riesgo en las relaciones sexuales.
En los próximos días, se espera la conclusión de peritajes clave que podrían definir el destino judicial del caso y arrojar más luz sobre una noche envuelta en misterio y polémica.
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