Blas Parera el español que quedó en la historia grande de Argentina por la letra del Himno Nacional

Quién no ha cantado el Himno Nacional con lágrimas en los ojos durante los partidos del Mundial de Qatar 2022 o tarareado alguna de sus estrofas más pegadizas.

Para empezar hay que poder diferenciar, Vicente López y Planes le puso letra a la canción insignia del país y el catalán Parera, la música tan característica. Pero, ¿Qué fue de la vida de este último?

Cataluña, aquella lejana tierra

Blas Parera o Blai Parera i Mont nació en Murcia el 3 de febrero, algunos dicen 1773 y otros 1776, lo cierto es que sus padres eran catalanes y de muy chico se mudó a Mataró para formar parte de la Capilla de Música del Colegio de Santa Anna donde cantaba y tocaba el armonio. Para 1797 se instaló en Buenos Aires trabajando de profesor de violín, piano y laúd y tocando el órgano donde lo contrataban.

Así nacía el Himno

Parera trabajó con el piano de los Thompson, pero los últimos arreglos terminaron siendo con el de la familia De Luca. Se supo que Blas se inspiró en el Himno de David para darle forma a algo que todavía no tenía nombre.

El nieto de López y Planes, también llamado Vicente, reveló que el la primera vez que se ejecutó fue en el salón del Consulado donde solo la elite de la sociedad porteña podía frecuentar. El 25 de mayo de 1813 se cantó por primera vez en la Plaza de la Victoria.

A Parera le pagaron 200, Don Vicente no quiso cobrar por contribuir en la elaboración de la llamada Marcha Patriótica.

Por decreto, el 11 de mayo de 1813 se aprobó la letra y música como Himno Nacional Argentino con una duración de veinte minutos. La música sufrió una pequeña modificación realizada por Juan Pedro Esnaola en 1847 y 1860.

Exilio

En julio de 1813, nuestro Blas se fue para Río de Janeiro para estudiar con Marcos Antonio Portugal. Volvió dos años después, hasta que decidió en 1818 volver a Europa para preservar su salud por la condición de español.

Murió en la pobreza donde creció, en Mataró, el 7 de enero de 1840 a los 63 años. Muy lejos de aquella lejana Aldea que lo recordaría hasta la eternidad.